Terapia para la Tristeza y la Depresión
Encuentra en Hylé tu Psicólogo para la Depresión en Barcelona
Es importante diferenciar entre tristeza y depresión. Cuando experimentamos una pérdida cualquiera, sea cual sea su magnitud y naturaleza – una pareja, la salud, un trabajo, un ser querido, etcétera -, normalmente viene acompañada de una sensación de tristeza, una de nuestras emociones primarias. La tristeza nos permite retirarnos a reflexionar y elaborar el duelo, sacar conclusiones, meditar alternativas y recargar pilas antes de volver a la acción. Por tanto, hay que aceptar que es una emoción necesaria y es imposible evitarla en ciertos momentos de nuestras vidas.
Sin embargo, si la tristeza es demasiado intensa, no hay una causa externa clara o se prolonga excesivamente en el tiempo nos podemos encontrar ante un problema psicológico conocido como depresión, puede ser una depresión leve, una depresión moderada o una depresión severa. Los síntomas habituales de una depresión son:
- Pérdida de placer o interés en realizar actividades.
- Dolor, malestar o insomnio.
- Disminución de peso y apetito.
- Sentimientos de culpa, impotencia, desesperanza o pesimismo.
- Fatiga, pérdida de energía y falta de concentración.
La persona tiende a culparse de todo aquello negativo que suceda, presentar una visión catastrófica del mundo y además creer que no hay perspectivas de mejora. En Hylé trabajamos tanto los procesos de duelo como las depresiones. En primer lugar, si la persona acude a terapia por tristeza o depresión sabemos que no se ha dado por vencida. Pedir ayuda profesional es un gran avance. Conoce a nuestros psicólogos para la depresión en Barcelona.
Nuestra Terapia para la Tristeza y la Depresión en Barcelona
Nuestra terapia para la depresión y la tristeza en Barcelona consiste en un acompañamiento por las diferentes fases que aparezcan. Se trata de acoger los sentimientos dolorosos, aceptación de la pérdida y la elaboración de una despedida para poder cerrar. En cuanto a la depresión, nos orientamos hacia dos vías principales: ayudar a la persona a ponerse de nuevo en movimiento, especialmente acudiendo o reconstruyendo su red de soporte social y por otro lado contrastar los pensamientos negativos con la realidad, fomentando la autoestima y autonomía.